El Centre Tecnològic de Catalunya (Eurecat) valora una nueva fórmula para reducir las emisiones de dióxido de carbono en el sector del transporte.
La investigación plantea el uso de materiales compuestos en el diseño de los vehículos de transporte, que sustituirían las piezas metálicas. Con un peso hasta 4 veces inferior, estos nuevos materiales permitirían crear vehículos más aerodinámicos, ligeros y eficientes desde el punto de vista del consumo de combustible.
Los materiales compuestos o composites consisten en una combinación de resina con otros materiales como la fibra de carbono o la fibra de vidrio, que permiten la fabricación de grandes piezas, con formas complejas, ligeras y con altas prestaciones mecánicas para sectores tan competitivos como la automoción, la aeronáutica o la arquitectura, entre muchos otros.
Esta medida se ve reforzada por la próxima entrada en vigor en 2020 de una nueva normativa europea, a partir de la cual la emisión de cada vehículo no deberá superar los 95 gramos de dióxido de carbono.