El requerimiento mundial del trasporte por carretera sigue aumentando durante las futuras décadas. Se presiente que en el año 2050 la exigencia de transportes pasará de los 44 trillones de kilómetros por transportista a 122 trillones de kilómetros. Así mismo el transporte por mercancías se valora que en ese tiempo se triplicará. Para interrumpir esta tendencia se tendrán que estudiar varias causas como por ejemplo el transporte compartido masivamente. De esta manera se minimizan las emisiones de CO2. La expansión de los vehículos autónomos incrementaría ligeramente los km por transportista. Así mismo el teletrabajo reduciría el transporte y las emisiones un dos por ciento en 2050 igual que el aumento de trenes de alta velocidad de carga. Los nuevos combustibles tanto por tierra como por aire reducirían un uno por ciento las emisiones. En su contra el aumento del E-Comerce hará que crezca notablemente el volumen del transporte de mercancías de un dos a un once por ciento para 2050. Las nuevas tecnologías de impresión 3D fabricadas a gran escala haría que se incremente notablemente el uso domestico por lo que el transporte se reduciría un veintiocho por ciento reduciendo notablemente de esta manera el transporte en un veintisiete por ciento. Si se ampliaran las rutas comerciales se reducirán kilómetros y tiempos en los transportes lo que supone una carga de tiempo y emisiones mucho menor. Las nuevas tecnologías también harían que se fabriquen nuevos camiones de alta capacidad los cuales aumentarían mucho la carga y se reducirían el numero de transportes necesarios para un mismo volumen de carga. La prohibición de circulación de vehículos antiguos o de vehículos que contaminan sería también un factor  que reduciría un 73% las emisiones de co2.